Mascar Coca en el Congreso: ¿Provocación o Acto Cultural?

El texto aborda el incidente en el que un político masca hojas de coca durante un debate en el Congreso. Explica la importancia cultural y ritual de la coca en la tradición quechua, destacando su uso como una práctica sagrada para la purificación y comunicación con los apus (espíritus de las montañas). La narrativa critica las perspectivas que ven este acto como una falta de respeto o provocación, argumentando que tales opiniones reflejan un colonialismo ideológico y cultural. El texto llama a reconocer y respetar la diversidad cultural y los derechos culturales de las poblaciones originarias.

Luis Alberto Medina

8/27/20212 min read

black blue and yellow textile
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En quechua, "kuka chakchay", "kuka akuy", "akulliy", "hallmay", "tuqray" son términos referidos al acto de masticar las hojas de la coca. Muchas veces, hemos asociado el acto de mascar la coca al trabajo rudo del campo, como una forma de energizante natural, y hemos olvidado que también es usado como un acto de purificación y como una forma de comunicarnos con nuestros apus.

Vi la imagen del Congresista Guido Bellido masticando coca pleno Congreso y me reí de buena gana. Fue una risa de complicidad, de recocijo también, pero por las razones que ahora expongo.

—Mira, el Bellido está chacchando su coca en el congreso—, le dije a mi acompañante.

—Ah, sí lo vi...—, me respondió.

—¡Qué paja! ¡Este sí que es de los nuestros!— agregué, provocador.

—A mí me llamó la atención, pero,... creo que no se vio bien— agregó.

—¿Por qué?, ¿cómo así?

—No sé, es como estar mascando chicle en pleno debate. Creo que no era el lugar ni el momento.

—¿Según quién?, ¿quién decide dónde y cuándo debe uno mascar su coca?

En seguida pasé a explicar. No hay punto de comparación. No es posible comparar el "kuka akulliy" con el acto de mascar chicle, por poner un ejemplo. Mientras el chicle es solo eso, un chicle, la coca es una hoja sagrada, ancestral, milenaria.

Los hombres quechuas no empiezan trabajo, faena o actividad alguna sin antes haber mascado la coca. ¿Por qué? Es un ritual ancestral, una práctica cultural. Las personas que mastican la coca, especialmente en actos importantes, lo hacen como una forma de purificarse y como una forma de congraciarse con los apus y consultar sobre el devenir de aquello que se va a emprender.

La coca es considerada una hoja sagrada por esto mismo; es una madre, por eso es la "kuka mama". El hombre, al hacerlo, le presta mucha atención al sabor de la coca. Si le sabe agrio, no le irá bien, será un mal día, no logrará el objetivo que se trazó. Si le sabe dulce o agradable, es signo de buen augurio.

¿Era el lugar y el momento para que el premier practique este rito andino? Sí, efectivamente, lo era. Porque la regla es esta: consultar con la coca mama antes de emprender cualquier acto, no importa qué ni dónde ni con quiénes.

—Ah... Entonces, todo cambia. Eso no sabía— dijo mi acompañante y dejó de preocuparse por el asunto de si era o no era el lugar y el momento indicado. De otra manera, entendió que es más bien un hecho cultural.

Se llama derechos culturales. La constitución nos faculta a hacer uso de nuestros derehos culturales -usos, prácticas, costumbres, modos de vida, formas de ser o de pensar, etc.

El actuar del señor Bellido puede parecerles a muchos indecente, provocador, inoportuno, etc., pero el hecho es el siguiente: ¿para quién?, ¿desde qué perspectiva estamos juzgando? Otra vez el asunto se resume a lo mismo: colonialismo ideológico y cultural.

En suma, el hecho se traduce en un gesto, un pequeño símbolo que es a la vez una imagen poderosa, una conquista, para las poblaciones originarias. ¿Muchos no están acostumbrados? Enhorabuena: es momento de quitarnos el velo que nos impide renonocernos como una nación pluricultural y pluriétnica.

¡Ah! Y... ¿saben qué hubiese sido realmente hermoso? Que todos los allí presentes se sienten a chacchar su coca, incluso la presidente del Congreso y los periodistas, antes de empezar el dabate. Pero eso ya es mucho pedir, pero -si tienen imaginación- vuelen un poquito.

¡¡Kawsachun Perú!!